
Shiva y Shakti son dos deidades principales en la mitología hindú que representan la energía masculina y femenina respectivamente.
Shiva es el dios de la destrucción y la transformación. Se lo representa como un asceta con cabello largo y una serpiente alrededor de su cuello. Es conocido por su tercer ojo que representa la sabiduría y el conocimiento. Shiva también es considerado como el creador del yoga y la danza cósmica.
Shakti, por otro lado, es la diosa de la energía y la creatividad. Se la representa como una mujer poderosa y enérgica, a menudo con múltiples brazos y símbolos divinos en cada mano. Shakti es la personificación de la fuerza vital y se cree que es la fuente de toda la existencia.
La relación entre Shiva y Shakti se considera un ejemplo de la unión divina. La energía masculina de Shiva se combina con la energía femenina de Shakti para crear todo lo que existe en el universo. Se dice que cuando Shiva y Shakti se unen en matrimonio, la energía divina se despierta en el universo, lo que lleva a la creación, la preservación y la destrucción de todo lo que existe.